Hoy os ofrecemos unas ideas y sugerencias con las que poder mejorar la iluminación y la distribución de vuestra vivienda, pues sabemos que la luz puede alterar y armonizar el diseño de cualquier habitación, además de ser uno de los elementos que más influye en el estado de ánimo del que la habita.

Empezaremos con el más evidente, que es dejar paso a la propia luz. Si la zona que deseamos potenciar cuenta con una ventana o cualquier otro hueco por el que entre luz, estos deben despejarse. Aunque suene obvio, muchas malas decisiones nos limitan gradualmente la cantidad de luz disponible, sobre todo la distribución del espacio; por ejemplo, colocar un sofá frente a un ventanal.

No todos los accesorios han tener el mismo tamaño, ya que el ojo buscará claridad visual sin centrarse en nada en particular. Por eso es importante saber elegir un punto clave de iluminación En espacio amplio, una lámpara de araña supondría un buen punto focal. En cambio, en uno pequeño, una lámpara de pie u otro tipo de apliques que bordeen una pieza a destacar en la pared pueden ser la opción más correcta.

Es interesante también la mezcla de varios tipos de luz. Esto nos hará jugar con sus efectos y transmitir diferentes sensaciones. Combinar luces frías y cálidas producirá tranquilidad o energía a nuestra voluntad en función de cómo se distribuya. Tampoco olvidemos que el color influye en la luz. Si lo que buscamos es una sensación de luz estable y bien repartida, optaremos por paredes blancas, ya que la reflejan más; algo que se potencia especialmente en las estancias más pequeñas.

Si queremos producir un efecto de equilibrio, se recomienda tener al menos tres fuentes de luz en cada estancia, incluido en el vestíbulo, lo que llamaríamos una iluminación en capas. En las zonas menos amplias, podemos reducir la potencia de las bombillas su tamaño para acomodar los metros cuadrados.

Finalmente, no nos olvidemos de los espejos, nuestros mejores aliados en esta pequeña misión. Gracias a ellos, además de “agrandar” el espacio, conseguimos reflejos del sol adicionales. Podemos optar por unos con acabado más clásico, o bien por los que vayan más acorde con nuestra decoración. Eso sí, deben estar posicionados de manera estratégica, mismamente ante un foco de luz natural o artificial. Si los muebles y paredes a su alrededor son claros, el efecto será mucho más fuerte.